A veces, la literatura es tan absurda como la vida
viernes, 22 de octubre de 2010
OTOÑO 30
La princesita de chocolate y sucedáneo de cristal estaba preocupada únicamente en recrear el mito de Narciso, pero yo hubiese dado cualquier cosa por acabar de despintarle la laca roja de sus uñas.
1 comentario:
Nunca me gustaron las mujeres de uñas lacadas... no son de fiar. Algo esconden bajo la capa de pintura....
Publicar un comentario